SORPRESA POR IGNORANCIA DEL PERFIL DEL ASESINO MACHISTA
El 16 de noviembre Celia Navarro era asesinada por su pareja en Mallorca, concretamente la mató a golpes con una tetera. Celia hace el número 65 en esa espantosa e inasumible cifra de mujeres asesinadas por violencia machista en 2016.
Al día siguiente, estaba yo viendo informativos Telecinco mientras comía, y casi me ahogo al escuchar a David Cantero (supongo que se limita a leer lo que escriben en la redacción de los informativos) decir que es “Un caso que sorprende por el perfil del agresor, licenciado en psicología y profesor de ética en un instituto”.
¿A quién le sorprende? ¿A él, a toda la redacción de informativos Telecinco?
Celia Navarro, víctima 64 este año de violencia machista
A mí sí que me causa sorpresa, más bien total estupor, que a estas alturas a alguien le sorprenda que un asesino machista sea licenciado en psicología, farmacéutico, fontanero o guardia civil. ¿Es que los 64 anteriores, y los más de 70 del año pasado, y así hasta el año que escojamos, eran asesinos a sueldo? ¿Es que no se han molestado en investigar cuál es el perfil de los maltratadores y asesinos machistas? Yo se lo digo: hombre. Punto. Los hay de 18 años y de 88, sin estudios y con todos los títulos a imaginar, en paro, jubilados, empresarios, policías, médicos, con poco dinero y millonarios, ….
No es de recibo que en el año en el que estamos sigan tratándose estos temas con ese nivel de ignorancia. ¿Qué les pasa a los medios de comunicación? Hasta hace nada hablaban de crímenes pasionales. Ha costado años de lucha que lo llamen violencia de género o machista. Aunque todavía en la mayoría de los casos no nos asesinan, nos morimos: por 20 puñaladas, de varios disparos, a golpes, que vaya manía que tenemos las mujeres de “morirnos” de forma violenta “a manos de” nuestras parejas. Salvo que seas una mujer periodista, entonces tus compañeros sí dirán que te han asesinado, como en el caso de Yolanda Pascual.
El lenguaje no es neutro, ni inocente. Porque lo hemos creado los seres humanos, y somos quienes lo utilizamos. El lenguaje da forma a la realidad que percibimos, y lo que no se nombra no existe.
¿Qué querían dar a entender en Informativos Telecinco con esta noticia? ¿Que les habría causado menos sorpresa que el asesino no tuviera estudios, o que los tuviera de ingeniería?
Me temo que lo que subyace en todo esto es un intento desesperado por no ver la realidad. Hay ciertas personas (muchas, por desgracia), que quieren pensar que los maltratadores y asesinos machistas son enfermos mentales, o gente malvada de un perfil muy concreto que se puede identificar de un vistazo.
Todo, lo que sea, con tal de no ver la realidad. La realidad de una sociedad y un mundo machistas que perpetúan el patriarcado. Que normalizan todo tipo de actitudes agresivas y dominantes hacia las mujeres. Que son el caldo de cultivo de la desigualdad, del desprecio hacia las mujeres, de las agresiones, el maltrato y los asesinatos.
El patriarcado es el inverso del “Traje del Rey”. Está ahí, todo el mundo puede verlo, nos bombardea desde púlpitos, televisiones, música, libros, tradiciones … Pero quienes están muy cómodos con él y no quieren que nada cambie están empeñados en hacernos ver que no existe, que desde que las mujeres podemos votar y trabajar se ha convertido en un invento de las feministas, que por supuesto lo único que queremos es vivir de ese “cuento”.
Y ese empeño en demonizar el feminismo y ridiculizar el concepto de patriarcado da muy buenos resultados en demasiada gente.
La frase “No son enfermos, son hijos sanos del patriarcado” no es un lema vacío. Es el resumen perfecto de lo que tanta gente se empeña en no ver, que hay un sistema machista que rige toda nuestra vida y que lleva a algunos hombres “sanos” a agredir y asesinar a mujeres porque las consideran de su propiedad o meros juguetes a su disposición.
Mientras escribo estas líneas otra mujer ha sido asesinada en un pueblo de León, a hachazos, por su expareja, que después se ha suicidado. La sangría que no cesa. Todavía no han dicho a qué se dedicaba él, pero quizá en este caso no sea fuente de incredulidad.
Y en el mismo bloque de noticias, también en Informativos Telecinco, han emitido el testimonio de una vecina de Mallorca que también se sorprendía del asesinato de Celia porque su pareja, además de profesor de ética, era muy religioso. Supongo que igual de religioso que los curas pederastas que han asolado infancias en medio mundo.
Si no somos capaces, como sociedad, de hacer un diagnóstico acertado del problema, jamás seremos capaces de acercarnos siquiera a la solución. Y eso, por mucho que les joda a los fans de forocoches, pasa por el feminismo.
Vídeo de la última concentración de Gafas Moradas el 17 de noviembre de 2016:
