‘NOSOTROS’ – A LA ESTELA DE DÉJAME SALIR
Déjame salir supuso un antes y un después para el otrora cómico Jordan Peele, director de la película que sorprendió a propios y extraños con una mezcla de suspense, humor negro y crítica social bastante curiosa y que le valió el Oscar a Mejor Guion Original el año pasado, no sin antes polarizar opiniones a favor y en contra del film. Pero por si quedaba alguna duda de que este es un realizador de culto, su nueva obra lo confirma: ahora son más extremas aún las disparidades entre los que aman o detestan esta película, viendo las reacciones iniciales de la crítica y las de muchos de los espectadores. No es de extrañar: Nosotros se asemeja mucho a Déjame salir en sus características pero sin lograr la buena ejecución de la que podía presumir aquella.
Si bien el comienzo y la premisa inicial de la que parte la historia enganchan y sustentan el interés de los espectadores, con un ritmo apropiados y una tensión in crescendo, ambos se disipan y se pierden conforme el guion, que es la base de cualquier película, se desarrolla y empieza a hacer aguas. Al final, se acelera la explicación de lo sucedido, hecha un poco para tontos, y se dejan más preguntas nuevas que respuestas, además de que Peele cierra con un final bastante predecible conforme se va acercando al mismo en el que se trata de introducir de manera muy repentina un mensaje de crítica y desigualdad que no se aprecia en el resto de la narración.
El hecho de que se califique al film como de terror o sobrenatural – un error por otra parte, como la de aquellos que valoraron Déjame salir solo en esos términos – no es por sí solo justificante de que los dobles malvados de los protagonistas actúen en pantalla de la manera en que se muestra. Su amenaza nunca termina de ser creíble frente a los personajes, quienes se libran con relativa facilidad y tienen tiempo para moverse sin mucha inquietud.
En un film que fundamenta su interés mayormente en el suspense y la tensión eso es algo que habla mal del mismo, más si tenemos en cuenta que Blumhouse, productora de Nosotros, se ha caracterizado por traernos en estos años buenas obras que lograban mantener el interés, no mirar el reloj y hacer creíbles tramas que, dentro de lo fantástico de su universo, parecían convincentes, como Insidious, The Purge o la propia Déjame Salir.
Para más inri, dos de los alicientes que hicieron al guion de aquella opera prima de Peele atractivo fueron esa crítica social a una sociedad norteamericana racial y post Trump y ese toque de humor negro que aligeraba la atmósfera opresiva de la que el protagonista no podía escapar.
Ingredientes que se aprecian de manera mucho más sutil o liviana en Nosotros. Sin esos elementos, la dirección acaba elaborando un producto incompleto, con grietas en las explicaciones y en la capacidad de comprensión hacia los personajes o el argumento, y los pocos momentos cómicos que hay no casan bien en escena cuando se introducen.
El hecho de que no sea la típica película de sustos permitía a Peele rodar colocando la cámara sin esconder tanto lo que podía ocurrir. Sin embargo, la falta de ritmo, la ambientación más abierta en cuanto al espacio, lo que no enturbia tanto la atmósfera, y un desarrollo de personajes poco creíble, sobre todo de los antagonistas, acaban por hacer que los planos generales e individuales no transmitan la sensación siniestra y de suspense que se presumía viendo el trailer del film.
Con este panorama, lo cierto es que el reparto, en general, cumple, sin estridencias ni excesos, aunque la única que realmente es capaz de infundir en el público una mayor inseguridad, temor y rabia ante los sucesos del film es la actriz que soporta más el peso de la acción, Lupita Nyong’o (12 años de esclavitud), frente al actor que interpreta a su marido, Winston Duke, que muestra más bien lo contrario: no saber qué ocurre en ningún momento. Mención aparte para la aparición del personaje interpretado por el nombre conocido de Elizabeth Moss (El cuento de la criada) y los roles de su familia ficticia, quienes directamente no se entiende muy bien por qué o para qué aparecen, dada su aportación a la trama.
En resumen, si podéis entreteneros con ella, mejor que no sea en el cine, por si acaso no es de vuestro agrado. Como decíamos al principio, Peele tiene habilidad para la polaridad de opiniones. Si ya os pasó con Déjame salir, desde Creative Katarsis os animamos a probar a ver qué ocurre con Nosotros. Quién sabe, igual os gusta más esta última. ¿Qué opináis vosotros?